Brasil dejó a los chilenos en la sexta colocación en la tabla de clasificación

La selección brasileña ganó su último partido oficial antes de la Copa del Mundo de Rusia. En la noche de este martes, el equipo liderado por Tite derrotó a Chile por 3 a 0 en el Palestra Italia, con goles de Paulinho y Gabriel Jesús (2), por la ronda final de las Eliminatorias. El resultado sacó al adversario del Mundial. 

En el caso de Chile, el presidente de Chile, José Luis Rodríguez, se mostró satisfecho con el resultado de la votación. El líder brasileño alcanzó los 41 puntos, muy lejos del segundo colocado Uruguay, con 31. Argentina (28) y Colombia (27) también se clasificaron para la Copa de Rusia.

En las eliminatorias, la selección brasileña hará sus últimos ajustes para el Mundial en una serie de amistosos. Los primeros serán contra Japón e Inglaterra en noviembre. Se espera que el equipo de Tite sea probado también contra la anfitriona Rusia en marzo de 2018, mes en que habrá un reencuentro con la verdura Alemania en Berlín. 

El juego - el equipo brasileño trató de demostrar la participación temprana en el partido contra Chile. El público presente en el Palestra Italia sólo empezó a vibrar, sin embargo, con algo que vio en la pantalla, y no en el césped, el anuncio del primer gol de Ecuador sobre Argentina.

Mientras los argentinos volvían el partido en Quito, Brasil empezaba a crear sus primeras chances de gol en Sao Paulo. A los 16 minutos, por ejemplo, el equipo de la casa sacó provecho de un error en la salida de balón de Chile, y Gabriel Jesús accionó a Neymar. El astro del París Saint-Germain se detuvo en el portero Claudio Bravo. 

A pesar de su marcación adelantada, Brasil enfrentaba dificultades para ser más efectivo ante la hinchada paulista, sin la exigencia de otros tiempos. El equipo de Tite, que estaba de pie y andaba de un lado a otro al borde del campo, pecaba en las triangulaciones en el tercio final del césped y en las conclusiones.

En el otro lado, Chile tenía la preocupación de no exponerse demasiado, hasta porque, a esa altura, se clasificaba con un empate. Además, valoraba bastante el tiempo cuando la pelota no estaba en juego, irritando a Neymar y sus amigos con una y otra faltas más duras. 

Al final del primer tiempo, después de que Gabriel Jesús se lamentar por cabecear la pelota encima de Bravo, Philippe Coutinho y Neymar fueron castigados con la tarjeta amarilla - un rojo representaría suspensión en la primera ronda de la Copa del Mundo, lo que sería motivo para aprehensión Comisión técnica.

De acuerdo con el auxiliar Cléber Xavier, sin embargo, Neymar "tiene madurez suficiente para jugar colgado", no necesitando ser sustituido por Tite. Quien movió en el descanso fue el técnico Juan Antonio Pizzi, cambiando Aránguiz, que era duda en las vísperas del partido, por Pulgar.